sábado, 31 de diciembre de 2011

Sayonara... Tomoe.

Me pregunto si alguna vez has tenido la necesidad de despedirte de mi. Lo digo, no solo porque hoy yo tenga ese gusanito... sino porque al que nunca le ha gustado despedirse de nada es a mi.

Y es que decir despedirse... al parecer lo tomo más como algo metafórico. No niego tu papel en mi pasado. No podría, ni quiero, es solo que... a últimas fechas me ha parecido muy pesado seguir cargando con las culpas, resentimientos, miedos y demás que me dejó todo lo que pasó.

No digo que ya no vengas o algo así. Es solo que puedo ver como tu vida ha seguido avanzado y me dá envidia. No solo por tu niña, sino por todo lo que te ha pasado desde hace seis años. Sé que tuviste que tomar al menos dos decisiones de las cuales sería fácil arrepentirte pero de las cuales no te puedes echar para atrás, menos por tu orgullo. No es que yo lo tenga muy bajo, lo sabes bien, pero sé con los años he aprendido a doblar las manos y pedir perdón con la cola entre las patas.

Todo lo que pedí para ti se te ha cumplido: Eres feliz, tu familia te sigue amando, terminaste la carrera que querías en una buena universidad, encontraste un buen esposo y te ha dado una niña sana y que se parece un chingo a ti, hasta se me figura que igual va a ser chaparrita. No es que yo no haya logrado nada hasta ahora... solo que me he tomado más mi tiempo. Y es bueno ver que  te vaya bien, sinceramente.

Por eso mismo, y porque yo también quisiera hacer lo mismo, creo que ha llegado el momento de decirle adiós a cierta parte de mi, no es que precisamente esté esperando que estés conmigo o algo así, la verdad es que no, pero si me he detenido mucho a penar, a tratar de enmendar aquello que hice... y a tratar de hacer las cosas para no decepcionarte.

¿Recuerdas la chica de la que te platiqué? La que te había dicho que quería brillar tanto que ella me notara y que dijiste que te daba envidia que ahora yo fuera el que pensara así... bueno, pués me notó... algo tarde jejeje, pero me notó. No hago esto por ella precisamente, hay algo que me dice que no debe ser así, pero si me gustaría, tu sabes, encontrar en ella eso... creo que lo tiene, pero...  hay algo...

Bueno... yo... solo quería despedir esa parte de mi. TU parte de mi. Pero no de una manera grosera. Tampoco tiernamente, porque así nunca me iba a ir. Y sé que aún penaré por ciertas cosas de los dos. Pero, contigo aprendí mucho como cagarla, y no sé si esta sea la buena, pero me encanta, así que no pienso cagarla... al menos tan feo.

Te quiero Mildred. Adiós.

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Hace unas horas mandé este texto en un mail... Obvio, sin esperar respuesta, al menos hoy mismo. Hay gente que tiene una familia jejeje. 

Todo esto fué por un propósito de año que vengo haciendo desde hace 2 ya, y que ahora en vísperas, sumado a ver las primeras cuatro OVAS de Rurouni Kenshin y a mi situación actual, por fin me animé a hacer. Es un adiós que había postergado, puesto que sabía que tenía que hacerlo, no encontraba un buen motivo para hacerlo.

De igual manera marca un cierre a ciertas cosas de mi vida, ciertas cosas con las que quizás no haga solo las pases, pero que sé que con un poco de ayuda puedo sacar adelante. Además de que, como lo resalto, quizás no sea el momento indicado, pero me gustaría también hacer ya mi propia vida. ¡Aunque me muera de miedo de solo pensarlo jajaja! o más que miedo... emoción... como cuando vas a un lugar nuevo y que no conoces nada de él.

Algunas veces se me ha comparado con el señorito Himura. Basta decir que ella, Mildred, fué mi Tomoe. La vaina de esta katana. Para resumir, en este momento, ya ha pasado el peregrinar y sigo con la intención de pagar por mis pecados, pero, ahora ya estoy abierto a encontrar a mi Kaoru... si no es que ella ya me encontró...

lunes, 26 de diciembre de 2011

"Yo soy el villano de esta historia"

Si te pregunta, dile que tu no tuviste la culpa, que la tuve yo.

Que estabas sola y yo me aproveché de eso para procurar estar siempre a tu lado.
Que estabas triste y yo saqué ventaja haciéndote reir todos los días.
Que nunca hablas y por eso yo nunca dejé de hablar.
Que te sentías deprimida y usé eso para hacerte sentir mejor.
Que ya no querías saber nada del mundo y me basé en eso para mostrarte otro diferente al que conocías.
Que te sentías debil y yo abusé de eso para darte fuerza.
Que cuando ya no creías encontrar a alguien que te hiciera soñar, llegué yo y despiadadamente me metí en tus sueños.
Que al verte seria, aproveché y te hice sonreir.
Que al verte a punto de llorar saqué provecho y te abracé y te dije que todo podía estar bien.

Háblale de todas las veces que te dije cosas para herirte. 
De todas las veces que te engañé.
O que tal de todas las que abusé de tu cofianza.
Tantas y tantas veces que te obligué a actuar en contra de tu voluntad.

Cuéntale de cuantas veces te dije en tu cara que no confiaba en ti.
Dile también lo enojado que estaba cuando te conté mi mayor pena y dolor.
Coméntale de todas las veces que te obligué a pararte de tu lugar para que te sentarás cerca de mi.
O de las veces en que te hacía llegar tarde a casa egoistamente solo porque mi camión llega hasta las 9 y media.

Dile de las tantas y tantas veces en que me le quedaba viendo a otras como si no estuvieras ahí.
De las veces en que parecía que me gustaban otras más que tu.
De que siempre te detengo tus piernas cuando las empiezas a mover.
Que siempre te dí de fumar, lo cual te mata poco a poco.

Aclárale que lo que yo hice solo fueron meses, un tiempo mucho menor, por lo mismo sin tanta importancia, comparado con el que tienen juntos.


Pero entonces también...

Cuéntale de como me alegra el verte ya en la escuela cuando yo llego.
De lo idiotamente feliz que me hace llevarte una alegría o una paleta.
Lo agradable que es para mi que pagues las copias y reniegues de que te pague.
Háblale de lo que te dije cuando me contaste que te había pasado hace un año.
Enséñale el vampirito y los demás peluchitos que te regalé cuando más triste te veía.
Coméntale que te regale de cumpleaños.
Dile cuantas invitaciones a tomar decliné con tal de pasarme aunque fuera 5 minutos más contigo.
Cuéntale que empecé a comprar  mentolados... solo porque a ti te gustan.
¡Dile cuanto me gustan tus benditas pecas!
Que a pesar de que no debo estar en el frío, cuando platicámos ni me duele mi cicatriz, a veces ni me acuerdo de ella.
Las veces que me la pasé estudiando con tal de explicarte (¡siendo que es pecado para mi!).
Leele lo que te escribí cuando ibas a dejar la escuela.
Lo cabrón que me siento cuando estoy contigo, como si nada me pudiera detener.
Háblale de lo mucho que me fascina el que seas tan madura.
O cuanto aprecio que seas tan educada.
O cuanto adoro cuando se te sale la maldad y dices algo en contra de alguien que se lo merece.


Dile que yo fuí el malo... dile que yo hice mal en enamorarme de ti, en soñar contigo... dile que todo lo hice sacando ventaja de tu situación... dile que todo lo hice por maldad...

Porque los malos nunca ganamos... y yo... soy el villano de esta historia.


sábado, 24 de diciembre de 2011

Mis fantasmas de Navidad

Navidad. Bueno, noche buena. Es difícil hoy en día lo admito... no ha sido un mes nada tranquilo. Ni sebtimental ni familiarmente, ni academicamente (jajajajaja), ni económicamente...

Total, una madre.

Es como si los fantasmas de las navidades me hubiesen visitado. El pasado al desayunar con mi padre. El presente con los pleitos que hay en mi familia. Y el futuro al darme la libertad de denuevo fijarme en alguien.
Pero, de cierta forma, al igual que en el relato de Dickens,  los tres fantasmas me han puesto a pensar en tantas cosas acerca de lo que gira en torno a mi. En cuanto al hecho de no dejarme vencer y lo que hace mucho me decían que quizás me dejaron aquí por algún motivo en especial.

La visita de mi padre fué algo complicado: darme cuenta de que muchas actitudes y expresiones que tengo son de él fué divertido; pero el ver con cuanto descaro habla de su vida, alegando el no poder cambiar... espero la voluntad siempre me alcance para no caer hacia esa parte... entendí una vez más que mi vida no se rige por ningún destino, ni mis genes deciden lo que haré o como lo haré, solo mi voluntad.

De igual manera, también estoy comprendiendo que mis genes no me atan a nadie, que no estoy obligado a nada por la sangre, sobre todo cuando no soy yo el primero en faltar al respeto a ese lazo. Lo siento mucho por la hija de mi prima, que realmente no tendría que estar pagando los platos rotos de su puta madre, pero los pecados de los padres los heredan los hijos... Aunque suene feo, pero no veo porque tratarle bien a inguna si solo he recibido insultos. La familia es la que uno elige, no la que nos ata la sangre.

Se siente bien volver a sentir, sé que la situación es muy poco virtuosa, o que la vitalidad de este ciclo será ridiculamente reducida, pero se siente bien otra vez  sentir como bombea la sangre o  que se te ponga la piel chinita por recordar un momento con ella. Definitivamente es una persona que me gustaría en mi futuro, pero no creo tener tanta suerte. Sé que caeré, pero también sé que voy a entregar todo luchando por este sueño, así, el día de mañana, pod´re estar orgulloso de haberla conocido, además de que cuando me levante de su caida seré mucho más fuerte, porque siempre es proporcional al grado de esperanza que haya tenido... y vaya que el pensar en ella me llena de esperanza.
El chiste es que después de ver a los tres fantasmas, me dí cuenta que lo que siempre le pedí a Dios, se me ha concedido:

Tengo una buena vida, con una gran familia. He escogido a mi propia familia y los quiero muchas veces más que gente que si tiene lazos sanguineos conmigo. La chica que me gusta es grandiosa, además de que las que me han gustado me han dejado lecciones invaluables. Los amigos que he encontrado en este mundo han sido y espero en un futuro sigan siendo, un gran apoyo, más que nada emocionalmente. He aprendido lo que he querido y me he vuelto una persona cercanamente autosuficiente y he de admitirlo... más maduro de lo que alguna vez creí...

En fin, al principio no encontraba como no verme grinch o mala onda al escribir esta entrada, pero a la mitad de ella... llegó la iluminación ^w^.  Me dí cuenta que quizás solo debía agradecer lo que tengo y dejarme de preocupar por lo que tuve o por lo que quizás no tendré. Es más, creo que agradezco más lo que no tengo, como hambre, pobreza, soledad, y toda una bola de mamadas que solo haría que de verdad me sintiera peor y con un buen motivo.

Creo que fué la Navidad, al menos, eso me gusta creer y vaya que me gusta creer en cosas así. Aún cuando las vean pendejas... no por nada es mi tercer periodo favorito del año ^w^

jueves, 22 de diciembre de 2011

Mi miedo al lobo...

Viendo algunas fotos de tiempos pasados... comienzo a preguntarme si de verdad añoro mi pasado o simplemente he estado huyendo de él....

No es una pregunta tan simple, y vista de otro modo podría tomarse como que en realidad el único que no deja que el lobo regrese fuera yo mismo.

Y es que de hecho es cierto. El lobo, o el batto, como se quiera ver, era en muchas formas una coraza, gracias a la cual pude conocer el mundo desde una perspectiva que si bien me ahorró muchos madrazos, también me privó muchos placeres asociados o no a esos madrazos. 

Por eso, aunque si bien tuve una buena formación emocional, la parte de mi que controla los sentimientos, en especial los afectivos, está ciertamente dañada o mejor dicho, sin usar, a pesar de los años y las andanzas. 

No es echarle la culpa al buen lobo, realmente es culpa mía por no saber cuando usarlo y cuando no, porque si bien, es parte de mi, no era necesario que estuviera todo el tiempo afuera... pero tal era mi miedo hacia el mundo al parecer.

¿He perdido ese miedo? Si, poco a poco. Hay cosas peores que un balazo, eso es seguro, pero al parecer son de las que me falta conocer aún.

Hoy en día, veo atisbos del viejo lobo intentando salir una y otra vez, no es malo, es como liberar presión. Por ejemplo, pensando en mi situación sentimental actual, el buen lobo muchas veces es el que me dice que diga o haga ciertas cosas que si bien, me permitirían salir airoso de una vez y para siempre, obvio solo, pero que me harían también perderme toda esa historia que aún guardo esperanza que se forje. 

Lo veo en su cueva, ya no tan dormido, sino más bien despierto, a petición mía, ya que aunque se volvió parte de mi, aún sigue siendo mi escape, sigue siendo como esa parte del beso borracho no correspondido que justificas de tal manera. Y aunque el último beso borracho que dí, tiene totalmente otra justificación, fué necesario despertar al canino, puesto que la situación como siempre... no me favorece.

Solo que al poner tanto en juego como he querido esta vez, me dió miedo, y al mismo tiempo que lo arraigo, le llamo para que lama mis heridas. Sé que no es justo, y que lo que hago es cobarde, pero... le tengo tanto miedo...

Esperar... a como se desarrolle todo, será angustioso, y más aún si el fin que leí hace tanto es cierto. Pero... si el fin llega mal... el lobo ahí estará... lo cual... lo juro... nunca es bueno...

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Breve semblanza de una mala vida amorosa

Hace mucho, mucho tiempo, sellé una parte de mi. Era una parte que en verdad me parecía molesta y que nunca me ayudó a nada. Era secundaria, así que no estaba muy feliz con lo que tenía. Además, de que el que te atropeyen y tengas que estar un mes en silla de ruedas y otras dos semanas en muletas puede con cualquiera. 

No puedo decir que la margura me consumió, puesto que sigo aquí, pero por más de 6 meses  todo fué diferente, era como si tuviera que desensibilizarme, como si al hacerlo pudiera resistir cualquier cosa: estaba en lo cierto.

El tiempo pasó, me encontré con más suerte que nada en un momento feliz de mi vida, todo salía aparatosamente bien, además de que me encontraba enfocado. La estabilidad que había buscado se me dió, así que decidí buscar más felicidad... pero craso error. Buscar felicidad en un complemento ciertamente es lo más común, y lo más adecuado... al menos para la mayoría... como me daría cuenta años más tarde, no pertenezco a esa mayoría.

Fuí rechazado en pleno 14 de febrero por una chica la cual había ayudado a los estudios, táctica que me sirvió con mis primeras dos novias... las cuales solo recuerdo el nombre de una jejejeje. Nunca he durado tanto como para de verdad encariñarme... más que una vez.

Y de hecho empezó a un mes de eso... retomar el contacto, hablar la verdad acerca de los sentimientos... otro tema recurrente en mi vida al parecer.  Fueron 4 años de ir y venir, de ser engañado, de burlarme, de aprender a caminar cada vez que el sol se ponía los domingos...

Entre esos tiempos se cruzó la historia de uno de los mejores amigos que he tenido y de su chica... el primer Sancho... y aunque técnicamente si me enamoré, lo olvidé al volver con mi oficial... la cual nunca quise divulgar... nunca me ha gustado que la gente sepa el 100% de mi, solo darles a pensar eso. Siempre he preferido tener una o dos rutas de escape para poder pensar en otra cosa que no sea mi línea principal de vida.

También en esas idas y venidas hubo otra. Ella quizás me marcó mucho más... si no es que es la segunda mujer que más ha cambiado mi vida sentimentalmente hablando. Fué la que me hizo descubrir que realmente tenía un lado tierno... el cual es desgraciadamente cursi para su propio bien. La recuerdo bien, puesto que también es a una de las personas que más me ha dado risa pero también me arrepiento de haber dañado.

Pero a partir de esas dos, me empecé a dar cuenta que el mundo podía ofrecerme más cosas que lo que yo veía solamente con mi oficial. Aclaro, no eran cuernos, puesto que con esa mujer fué mucho prueba y error con otras personas... no podría esperar menos de dos personas tan dañadas como ella y yo que la que quizás si algún día llegara a contar, la relación más dañada que he conocido o leido de o cualquier cosa del mundo... al menos ahora que quisiera algo serio la veo así... y sé que ella compartiría mi punto.

Las que vinieron después, tanto en la superior como en los trabajos, no es que no merezcan mención, lo que pasa es que no aprendí nada de ellas. Había llegado un punto a partir del 19 de noviembre del 2005, osea mucho antes, en que ya no tenía respeto por absolutamente nada, en que si de por si, me gustaba destruir, esta vez lo ansiaba, lo anhleaba, me corroía por dentro el hecho de desatar caos.

Recuerdo que en ese 2005 tuve que fabricar varias situaciones, difundir ciertos rumores, hacerle pensar ala gente que estaba mal o amargado por otras cosas... fué cuado empecé a dejarme el cabello largo precisamente... Ni decir, que el que mi oficial me dejara me hizo un culero... ya lo era... solo que esta vez, me creí todo y lo comencé a ser pero si en serio, al menos... solo en ciertas cuestiones.

Escribía cosas como esta cuando ella estaba conmigo. Al año, ya estaba buscando como crecer y mejorarme.

Así pasó el tiempo, mucho tiempo la verdad. Y aunque he buscado entregarme cada vez, o he intetado dar lo mejor de mi... no he encontrado algo que me haga feliz, como de alguna manera recuerdo que lo era... esa estabilidad... pero sin estabilidad, esa pareja que me dé la oportunidad de abrirme completamente y que me motive a crecer...

Hoy en día he encontrado a alguien, pero como dice la maldición "...ha de estar ocupada", porque al parecer si no hay un esfuerzo o lucha, no puedo acceder a nada, lo cual está bien. No digo que esta sea la indicada o algo así... pero definitivamente hay algo diferente a las demás en ella. Tomando en cuenta lo estable y tranquilo de mi situación actual, más el aburrimiento que tengo... y el que me he planteado de meta el brillar tanto que ella me note... cumple con ciertos criterios.

En fin, solo queda esperar que esta sea la última semblanza de este tipo que hago, y que no sea porque me muera o pierda mis manos o algo así... aunque de ser sinceros... ha sido muy divertido todo esto y ya no me hayo con pareja, no sé si sabría aguantar ese ritmo otra vez... dejemoslo en un sano: "ya veremos dijo el ciego".

lunes, 19 de diciembre de 2011

Aún más esperanza.


No miento, sé de buena fuente, que llevo las de perder. Sobre todo porque nunca ha sido diferente, y aunque sé, también de buena fuente, que ella es MI excepción, no puedo dejar de pensar que realmente esto es igual a mis demás derrotas.

Bueno, no precisamente igual, realmente solo quiero ser pesimista, porque incluso el realismo me llevaría a perder la cabeza en un segundo por ella. ¡Dios sabe que eso es realmente lo que quiero!

Y hablando del tipo, obra en formas tan misteriosas que no desconfío de él, además de que él. mejor que nadie, sabe que el grado de felicidad que me dejó, me podría rendir para otros dos o tres años.

Pero quiero más, muero por más, como le dije a mi hermano, “lo siento, ¡soy capitalista!”.

Temer por el daño… jajajajaja, ¡vivo para estos momentos! Estoy más que entrenado para este tipo de situaciones, pero no para ganar, para perder, soy orgulloso miembro fundador del club de L.O.S.E.R.S.

Lo admito, no será fácil salir de ese daño, esta, en verdad es buena, y sí, sé que siempre lo digo y que también siempre digo que esta vez si es en serio, pero realmente creo que si no lo dijera cada vez me sentiría hipócrita, y siempre, entre mejor la considero, más fuerte es el madrazo.

No quiero siquiera pensar en el hecho de que hacer, siempre he sido mejor improvisando en estas cosas, además de que así es más divertido, solo que no quisiera que fuera tan divertido esta vez, esta vez si me gustaría ponerle seriedad al asunto.

Jugar a matar.
O morir.

Se lo merece, además de que esta mujer ¡WoW!… vale la pena que haga 10,000 pendejadas por segundo por ella. No solo por lo que siente por mi, sino por lo que he visto de ella.

Es grandioso pensar en que al fin encontré algo que si puedo decir que vale la pena, es como volver a sentirme vivo después de años, sobre todo porque esta vez no tengo ninguna duda de ello, además de que sinceramente el reto que presenta está al nivel de la recompensa, no solo física, sino mentalmente y sentimentalmente.

Aún sigo fascinado por tantas y tantas cosas que veo y que presiento de ella… pocas veces había estado tan abducido por el misterio de una persona… sobre todo porque siempre puedo leer fácilmente a las personas.

Lo que leo en ella son tantas, pero tantas cosas que contrastan con su personalidad, al menos con lo que deja ver, que me pregunto cada día que es lo que no dice… claro, si me hubiera dado cuenta de cierto detalle antes, no tendría que estar escribiendo esto… y eso es lo más maravilloso del asunto. Lo que me alienta a seguir cada vez más fuerte y decidido.

Sé que me enamoré, pero no lo sé cada vez que pienso en ella, lo sé cada vez que escucho alguna canción que me recuerde momentos con ella, o las canciones que he bajado mientras escribo acerca de ella. Cada vez que veo unos nachos, o un capuccino de cajeta… por cierto si el asunto se pone feo, no compraré jamás otras vez marlboro negros jajaja.

Así como antes de una buena peda es bueno mentalizarse a que eso que vas a hacer va a doler al día siguiente, en este caso, es bueno irse mentalizando a que esto no solo dolerá, sino que arrancará cachos…

Pero aún tengo esperanza, de hecho, un chingo, para dar y repartir si es necesario, y si mis sueños pueden hacer que ella esté bien un día más… ¡joder!¡a chingar a su madre la maldición!
 Dame fuerzas Kal...

Esperanza

Aún guardo el recuerdo de tu voz…

Lo sé, no va ni un día de que te vi, solo unas horas, pero el recuerdo alimenta el hecho de saberme sin ti.

No exageraré el hecho de que aún siento tus manos acariciándome, o el roce de tus labios sobre los míos. Pero si tuviera que exagerarlo, diría que los mismos dioses anhelarían tener algo así para ellos.

Soy feliz, puesto que lo tuve, agonizo de solo pensar que quizás nunca lo tendré de nuevo.

Pero, estoy bien, te prometí estar bien, y esos mismos recuerdos me ayudan mucho, de hecho, demasiado. Todavía me pregunto como pude vivir sin ellos, es como si me hubiera vuelto adicto al simple hecho de tocar tus manos, jugar con tu cabello o besar tu cuello.

Por años he escrito de fé, de voluntad, de esperanza, pero hasta que toqué, por segunda vez, tu boca con la mía, solo tenía una vaga idea de lo que eran estas tres cosas y otra más, la felicidad.

No niego ni reniego de mi pasado, de las mujeres que han cambiado mi vida, que han alimentado mi alma. Pero tú de entre todas, has sabido llegar más allá de lo que yo quisiera que alguien llegara, no puedo mentir tan fácil y decir que en algún momento esperé encontrar a alguien que lo hiciera… me hice tanto de corazas y aislé tanto tantas cosas que a veces ni siquiera me permití ver más allá de mi propio corazón.

Durante mucho tiempo te observé, te fui conociendo, sin bajar jamás mis defensas… a la fecha no concibo que un ser tan hermoso y con tal potencial como tu se haya fijado en un alma pérdida como yo.

No creí jamás merecerme tal regalo, tal triunfo, a la fecha lo pondría en duda, pero lo que mi corazón no entiende, tus labios y tus ojos me lo han demostrado.

Duele fatal estar sin ti, desde hace casi una semana que sé eso, pero dolería más, de no ser porque aún guardo en mi mente la imagen de tus ojos, en mis manos el sentir de tu cabello, en mis labios el sabor de tu boca y en mi corazón una esperanza, la más fuerte pero más pequeña que alguna vez ha habitado en mi ser.

Has sido estos meses mi razón para brillar, para mejorar, para esforzarme más que los demás, para hacer cosas buenas por los demás, para crecer y ser fuerte. Quería brillar a manera que algún día me notaras, jeje, claro, sin saberlo ya vivía en tu corazón, pero quizás es mejor así.

No sé que vaya a pasar en el futuro, por eso le tengo tanto miedo… o tenía, ahora estoy impaciente, quisiera ver como se va desenvolviendo esto, no solo si lograremos estar juntos o simplemente me caigo otra vez.

Si en estos dos días que hemos estado juntos, me he permitido y me has hecho ser tan feliz como hacía mucho tiempo no lo hacía, me gustaría ver que viene a continuación, que situaciones se darán, que grandes sueños y pesadillas surgirán de los siguientes meses.

El resultado… el resultado está por demás, es el viaje, el como llegar, lo que lo hace interesante… y como te prometí: divertido.

Esa, es mi esperanza y tu, mi sueño más anhleado y por el que más voy a pelear.

 Es como la quinta vez que pongo a Rukia, pero es que se parece tanto ^w^

Miedo y esperanza.


No encuentro que escribir, pero sé que debo hacerlo.

Tengo dos sentimientos ahora en mi:

Uno es un amargo sabor a derrota, tan cortante que quizás hasta sería capaz de una locura, nada grave… la muerte no me sienta bien, además de que las viejas mañas no deben ser retomadas.

El otro… lo he conocido mucho, mucho tiempo. Le llamo esperanza. Tan grande, tan fuerte, tan irrompiblemente irrompible que podría hacer ver como un tonto a cualquier soñador.

Es difícil tener esas dos cosas a la vez, un momento toma la batuta uno, y al siguiente el otro…

Mi mente me juega bromas, no decide entre uno y otro. Por un lado, tengo todas las de perder, pero no tengo miedo de perder, pero también por primera vez, puedo decir a ciencia cierta que me gustaría ganar.

Las cosas que dije en la tarde/noche, eran tan reales que me espantaba lo que llegaba a pensar después de decirlas, pero la veía, y me daba cuenta de que cada vez quería decirlas más en serio, que por primera vez en mi vida estaba dispuesto a absolutamente todo, que ella sin decir nada me hacía creer, me hacía querer estar con ella por siempre… si… por siempre.

Para alguien como yo que le tiene tanto miedo a su futuro y al rebote de la suerte, empezaba a dejar ese miedo, empezaba a creer en si mismo y que las cosas pueden estar bien. Empecé a creer de nuevo en que todo podía mejorar, que por fin había llegado al lugar que me merecía.

Quería quedarme ahí, con ella, por el resto de mi vida.

Pero… porque siempre hay un pero, al parecer nunca tendré las cosas fáciles.

No son tantas cosas las que no nos permiten estar juntos, pero, son importantes, son cosas que yo hace rato dejé de entender: compromisos, tradiciones, más que nada, respeto e incluso, pensándolo lo más pesimistamente, amor.

Tiendo a pensar lo peor, a creer que lo que siento por ella no es lo suficientemente fuerte, que estoy equivocado al quererla… o amarla tanto. O que quizás y solo quizás, todo fue un sueño.

Y es ahí donde me crezco, es ahí donde encuentro fuerzas, en el sueño, en pensar que ella se ha vuelto parte de mi sueño y que como siempre diré, vale la pena luchar por cualquier sueño que se tenga.

Donde menos debería de apoyarme, ahí es donde más le recuerdo, donde más me dá fuerza pensar en ella, donde sé que a esa chaparrita y a mi nos queda mucho por delante y que esto no acaba más que de empezar.

¿Miedo? Si, porque sin el miedo, no hay esperanza, y hoy en día, y por el resto del tiempo que me quede junto a ella me aferraré a este sentimiento ¡con todas las fuerzas que tengo!

No voy a perder ni a bajar los brazos, no dejaré que me domine el miedo como otras veces, ella saca lo mejor de mi, y pienso sacar todavía más, no dejaré que se me niegue la felicidad, ya no más. Y si se dá el caso de que esta sea otra derrota, daré una pelea, que será recordada por generaciones, se hablará de esto en los libros y se mostrará como el signo de que la esperanza puede vencer cualquier adversidad.

Este calor en mi corazón es la prueba de mi voluntad de fuego, de que tengo las agallas de nunca rendirme y de que esta vez, y quizás solo por esta vez… te pido Lupita, te ofrezco mi miedo, te ofrezco mi esperanza, no para que todo me salga bien, solo para que ella, pase lo que pase, termine con quien termine y como termine, sea feliz, la más feliz de este mundo, eso, eso es lo que de verdad quiero.

¡ Arde voluntad del fuego, arde hasta extinguirlo todo!

viernes, 16 de diciembre de 2011

La luz

Atardece otra vez. Él, la imagina descansando bajo un pórtico, el cual ni siquiera conoce o existe. Le gusta pensar que ella está viendo el mismo sol que él mientras este baja para dar lugar a la noche.

Ni siquiera hay un suspiro para el, pero el no lo sabe y tampoco lo quiere creer. Piensa que de algún modo u otro modo la vida ha de corresponderle tanto sufrir, no solo por ella, sino el de tantos años de desesperanza.

Ella entra a dormir, reposa su cabeza en una almohada, dormitando, musitando frases a su persona amada. Una y otra vez la imagen cruza por su cabeza, él lo sabe: no es el. Quiere creer que ese cielo estrellado que lo cubre fue tapizado por cada uno de sus deseos de estar juntos, pero la razón vence a su corazón y rompe el silencio de su alma con un grito que ha de repetir una y otra vez. 

Se dice a si mismo que desista, que no puede luchar contra algo tan grande, pero también su corazón le hace creer que no podría haber obstaculos mientras sus sentimientos sean sinceros. A final de cuentas él le podría enseñar que detrás de la oscuridad que dejo aquel, aun hay una luz que ambos pueden seguir.

Poco a poco se convence de que quizás, él no es el indicado, que esa persona que quiere a su lado solo le traera sufrimiento y aun cuando anhela ese sufrimiento, lucha por convencerse de que no merece tal sacrificio.

Quizás sea mejor caminar sin miedo hacia la luz en compañia solamente de si mismo. Aun cuando la suerte este echada, el confia en su corazon para vencer cualquier obstaculo.




Sus pies llenos de lodo se separan del suelo una y otra vez en busca de la tan ansiada claridad y asi la tranquilidad. Lo que no sabe, es que la luz hace rato que se extinguió, aun para los que seguian creyendo en ella. 

jueves, 15 de diciembre de 2011

Feel... un día después.

En lo particular, 2 lineas se me vienen a la mente.

-Necesito un cigarro. 
Dicha por un servidor en incontables ocasiones.

Y

-Hoy festeja... mañana piensa.
Que fué lo que me dijo mi hermana la noche de ayer.

No he fumado en todo el bendito día, más por convicción que otra cosa, lo cual, he de agregar, me resulta más molesto aún, eso sumado a la angustia del brazo (el cual cagadamente ahora pintando ya no me duele) tienen cierto efecto.... Y ¿porque por convicción?  a veces el inducirnos un estado de desesperación puede hacernos ver las cosas desde otro enfoque,  y definitivamente necesitaba otro enfoque.

No es fácil hablar de esto, puesto que no tengo ni los puntos suficientes ni  evidencias de la mayoría de las cosas a las que temo. Pero lo que si puedo decir es como me siento.

Y son muchas cosas.

Decepcionado de mi mismo. Es común que en estos casos haya uno o varios que recuerden al buen antiguo fifo. No sé como chingados se supone que la edad te va amargando y a mi me ha pasado al contrario. Era más jodidamente fácil esto antes, no me preguntaba las cosas, solo las hacía... ¿esperanza de "ganar"? jajajajaja, ni siquiera creía que cosas como la esperanza, la fé o el amor existieran o valieran la pena, eso lo hacía todo putamente más fácil.

Inseguro. Porque si "él" es quien creo que es, esto sería una victoria fácil o una derrota humillante. ninguna de las dos me agrada la verdad, estoy lo suficientemente dañado como para considerar que una victoria fácil sería degradante y sin chiste; la derrota humillante sería grandiosa de muchas maneras por el aprendizaje que me dejaría... obvio si no fuera definitiva, lo cual creo es demasiado poco probable, tomando en cuenta el rubro, el balazo era más cercano. Obvio, el querer ganar y no querer perder también está de por medio.

Confundido. Sus expresiones, señales, caricias, besos, etc. no eran como en otras ocasiones... esta vez había cierta diferencia que a falta de una mejor virtud atribuiré a "sinceridad". En la despedida ví tristeza, no arrepentimiento, como otras tantas veces. Pero entonces... ¿porque es tan complicado? ¿De verdad lo es o más vale malo por conocido que bueno por conocer?

Con miedo: Obvio, a quien chingados le gusta que le rompan el corazón. Aunque a decir verdad, por eso no quiero siquiera apostarlo... pero sé que ya lo hice de cierto modo. Y es que por más que quiero volver a mi status quo tradicional tengo flashbacks de sus labios, su cabello, sus manos buscando las mías, sus pestañotas, sus ojos mientras atardecía, sus pecas, el beso en el café, el abrazarla de pie y que justo quedara su cabeza  bajo mi mentón... idioteces que debería dejar pasar... que sería mejor no tuviera... puesto que estaría más tranquilo, menos estúpido, más enfocado. El mejor en lo que hace... pero... nunca tan lleno de gracia como ahora.

Impaciente. Esta es fácil de explicar. Obvio, la quiero ver otra vez. No porque crea que va a volver a pasar. De hecho, por la estadísttica de los casos documentados del club de L.O.S.E.R.S., sé que las probabilidades de otro encuentro de la misma naturaleza son cercanas a cero. Y aunque el niño en mi, dice que eso es mejor que nada, también la parte consciente desea verla, puesto que deseo preguntarle tantas cosas... y no escuchar absolutamente ninguna de las respuestas. Solo quedarmele viendo ahí , admirando como intenta responder sin "hacerme daño".

Molesto, cansado,con sueño, a ratos feliz, a ratos emputado.... en fin, la serie de emociones normales de estos casos, pero con un toque un poco diferente esta vez: una parte de mi lo vé todo, lo analiza todo y no se deja llevar, solo se desconecta cuando es necesario... esa parte es mi salve, esa parte es mi as bajo la manga... y Dios me libre de tener que recurrir a esa parte de mi de nuevo...

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Lo crudo Lo amargo Lo dulce

Todo puede ser visto crudamente... lo importante es cuando verlo crudamente.

Si vemos todo así, todo el tiempo, la vida suele terminar siendo algo aburrido. Pero si a esa crudeza le echamos amargura en un limón, se coce y sabe mejor.

Aún cuando he elegido vivir mi vida así, hay ciertos momentos que llenan de dulzura el aire, que podrían hacer que el iceberg que llevo en el pecho se derritiera. El día de ayer fué uno de ellos.

Magnífico, desde la concepción, ejecución e incluso la parte de improvisación estuvo, no solo bien, sino excelente. Pero... algo murió...

No soy el mismo, eso lo tengo muy claro, ahora me duele más que antes, y sé el desenlace de esta historia antes de que se desenvuelva... eso es lo crudo.

Lo amargo es el hecho de que solo podía hacer una cosa para evitarlo, meterme el pie a mi mismo y a mis aspiraciones, dado que lo más seguro es que pierda, levantar una bandera blanca.

Si, veo la vida así. Pero no la vivo así.

Pocas veces dejo a mi corazón tomar decisiones, porque siempre se equivoca. Pero si he de admitirle algo, en el tiempo en el que pienso que todo está bien, es lo mejor de este mundo seguirlo, y muchas veces, ha valido el sufrimiento, si no es que todas.

Ayer tenía la cabeza fría, y se suponía el pecho igual... pero seguí el ciclo... hice lo que mi corazón mandó... y ahora estoy colgando en ese hilito de sangre llamado "esperanza". Una esperanza que, en honor a la verdad, no creo, ni juzgo mal fundada, solamente, que creo que hay algo más fuerte que yo, un lazo... pero esos se cortan.

No veo en esto, crudamente, algo definitorio. Amargamente, lo veo del otro lado, decisiones, plazos, etc. Y de esa tercera parte que he planteado ahora... sé que mientras pueda, no me rendiré, no decaeré... quizás lo había visto mal... pero quizás ese plazo, es precisamente el que se me ha otorgado, aún que por lo que entiendo, solo me quedan 2 años a mi aquí, es menos del plazo que se ha establecido...

Ah, por cierto, creo que ya tengo un nombre para esa parte: 

dulce.
Y esa parte, al menos ayer, hizo que me sintiera vivo de nuevo.

Pero hoy... hoy debo de pensar en tres, si no quiero fallar o destruirme, debo tener presente todos esos aspectos de lo que pase y mantener esas tres visiones a la mano.


Lo crudo
Lo amargo
Lo dulce

Eso claro... si quiero evitar a cierto... conocido...